La casuarina, que se conoce comúnmente como árbol de la tristeza, es una especie de árboles semiperennes, de costas tropicales, muy útil como cortina forestal rompeviento.
Endémica de Australia, Malasia, Polinesia, en las islas hawaianas donde fue una especie introducida, crece tanto en costas arenosas xéricas, salitrosas, calcáreas, como en las montañas sobre áreas de pesada pluviosidad de suelos volcánicos. Las plantas se fijan muy bien al suelo y tienen propiedades alelopáticas, evidenciada por la ausencia cercana a la copa de vegetales, y una cubierta de sus detritus.
La casuarina es muy útil para reforestación rural y urbana en trópicos, subtrópicos y regiones templadas.