Caracterizada por su coloración azulada en frente y bridas (unas plumas que parecen gruesos pelos en su boca y sobre los ojos) y color amarillo en garganta, mejillas y píleo (la parte superior de la cabeza), esta especie cuenta con borde de las alas amarillo o rojo. Aunque no existe diferencia física entre ambos sexos, los ejemplares jóvenes sí que se diferencian por una coloración distinta, en tonos más pálidos que en la edad adulta. Además, las pupilas de sus ojos son de color gris oscuro hasta alrededor del año de edad, hasta alcanzar el tono naranja de los adultos.
Durante la noche, grandes bandadas se refugian y protegen en zonas densas del bosque, que abandonan cuando salen de día en busca de comida, principalmente semillas, frutos de árboles, de cactus o palmeras,... aunque se adaptan a cualquier tipo de comida que encuentren. En este momento, suelen volar también en grupo, en el que permanecen unidas las parejas ya formadas. Las hembras realizan la puesta, de tres o cuatro huevos, en huecos de los árboles, preferiblemente de gran altura. Los pollos nacerán ciegos y sin plumas y tardarán en abandonar el nido alrededor de dos meses.
Aunque cuenta con un gran área de distribución y grandes poblaciones a lo largo de Brasil, Paraguay, Bolivia o el norte de Argentina, esta especie es capturada para el comercio como mascota. Además, existe una disminución en el tamaño y calidad de los ecosistemas, siendo su hábitat reemplazado por campos de cultivo en numerosas zonas.